Como en “El traidor”, otro amplio panorama de un mundo cambiante, el destacado director italiano Marco Bellocchio expone un tema muy delicado y una parte de la historia de un pueblo y la influencia de las divisiones religiosas. Se sabe que el Vaticano es responsable de muchos males de los que no se habla, y esta historia es sólo uno de los detalles de todo eso. Es algo que les pasó a muchas familias en la segunda mitad del siglo XIX porque todavía prevalecía la influencia de la Inquisición. En “Secuestrado” relata un episodio vergonzoso en los últimos días del poder secular papal antes de la unificación del Estado italiano, en el que el “Santo Oficio” ordena arrancar de los brazos a un niño judío de 6 años. de sus padres a causa de un supuesto bautismo furtivo e ilícito realizado cuando era un niño, convirtiéndolo en un cristiano que, por la protección de su alma inmortal, ya no podía criarse en una familia judía. Lo llevan a Roma, para ser criado en una institución para niños conversos destinados al sacerdocio, mientras su caso se convierte en un escándalo internacional, aprovechado por círculos anticlericales en toda Europa y más allá, para inmensa irritación del Papa y la Curia. . Es bueno ver la historia de la Iglesia Católica.